Nota: Este artículo de nuestra autoría fue publicado originalmente en Familias.com
Desde que nos estábamos preparando para casarnos mi esposo y yo, conocimos una gran cantidad de familias en las cuales marido y mujer manejaban sus finanzas de forma separada; entre ellos la pareja que nos estaba preparando espiritualmente para nuestra nueva vida. Esta es la razón por la cual Daniel y yo decidimos escribir este artículo.
Alguna vez te preguntaste: ¿cuál es la mejor forma de administrar tu dinero en el matrimonio? El reconocido autor financiero Larry Burkett dice que “el dinero es la mejor o la peor área de comunicación en los matrimonios”. Así que si has estado casado o casada por lo menos 30 minutos y ya tienes peleas a causa del dinero, puedes considerarte “normal”. De ésta y muchas situaciones surge el dilema de los esposos, sobre si deben o no combinar sus finanzas. Nuestra recomendación y la de muchos expertos en el área de finanzas familiares es que, ya sea que en casa existan uno o dos ingresos, estos deben ser tomados en cuenta como uno solo, independientemente de quién trabaje fuera del hogar. A continuación, te damos los 8 puntos, en base a nuestra experiencia, de por qué los cónyuges deben hacer esto una vez que deciden unir sus vidas para siempre:
-
1. Aprendes a negociar con tu cónyuge
Los esposos aprenden a establecer prioridades juntos y a desarrollar una dinámica de negociación en la que ambos consideran las necesidades y deseos del otro. En cambio, cuando cada quien maneja su propia economía, no existe tal negociación y cuidado por el otro. Además, cuando logramos llegar a un acuerdo de cómo gastar nuestro dinero, la toma de decisiones en otras áreas tendrá el mismo proceso saludable, excepto claro, el de escoger la película que vamos a ver el viernes por la noche.
2. Mejora la comunicación
Estar en mutuo acuerdo en cómo administrar los ingresos aumenta la comunicación en el matrimonio, debido al grado de negociación, planificación y toma de decisiones que ello implica. Lo mejor de todo es que nos ayuda a hacer realidad todas esas metas que los dos anhelamos. Y como dice el conocido gurú de las finanzas Dave Ramsey: “si pueden hablar de dinero prácticamente pueden hablar de cualquier cosa”.
3. Aumenta el compromiso
Ambos cónyuges tienen voz y voto a la hora de decidir cómo utilizar sus recursos, por lo tanto tienen el mismo nivel de compromiso. Por otra parte, cuando cada quien maneja sus propios recursos, él o ella velan por sus propios intereses y no por los de su nueva familia. Tener dos cuentas de banco, es como tener un pie fuera del matrimonio: no existe un compromiso total, ni en la economía ni en otros factores importantes de la relación.
4. Experimentas una nueva libertad
No se trata de perder tu independencia, como muchos suponen, sino de compartirla plenamente con la persona más importante de tu vida, y llegar juntos, todavía más lejos.
5. Aumenta la intimidad entre ustedes
Muchos matrimonios descubren que al estar unidos en la forma de administrar su dinero aumenta su intimidad. ¿A quién no le gusta saber que su cónyuge pone a su entera disposición y hace de su total conocimiento, cada centavo que gana? En este punto, el dinero juega un papel emocional muy importante para la relación. Con esta forma conjunta de manejar nuestras finanzas, nos estamos diciendo uno al otro de manera constante: “te amo, confío en ti”.
6. Previenes la infidelidad
El tener ciertas áreas de nuestras vidas separadas podría llevar más tarde a separar otras. El tener una sola cuenta produce no solo unidad, honestidad y transparencia, sino que también nos da el sentido que estamos juntos en esto y en todo lo demás.
7. Crece la unidad
Si queremos tener un matrimonio saludable y duradero, debemos comenzar por trabajar en equipo. Después de todo, cuando nos casamos, el sacerdote o ministro, nos dice estas sabias palabras: “Ahora ya no son dos sino son uno solo”. Por lo tanto, debemos actuar como un solo cuerpo y una sola mente en todas las áreas de nuestras vidas ¡incluyendo las finanzas!
8. Tu matrimonio tiene más probabilidades de éxito
Actualmente la causa número uno de divorcios en los Estados Unidos es el dinero. Si aprenden a manejar conjuntamente este factor tan determinante en sus vidas, las probabilidades de permanecer juntos es mucho mayor.
Si a estas alturas, ustedes esposos, no han casado sus cuentas de banco ¿qué están esperando? Una vez unidas para siempre, éstas serán una sola economía, así como ustedes dos son ya una sola carne. Por último, hagan lo que hagan, no den lugar al estrés, después de todo, solo se trata de dinero. Nada debe ser más importante que su relación.