Celebro que estés utilizando la popularidad que adquiriste en la rueda de prensa de Donald Trump para defender a los millones de hispanos que son objeto del odio de este inhumano magnate que ahora aspira a ser presidente.
Interrumpir y tratar de robarle la palabra a otro reportero, para después ser escoltado por un guardia de seguridad a la puerta del lugar, sí que te ayudó a obtener atención internacional (aunque los medios para lograrlo no correspondan a un comunicador de renombre como tú).
Sin embargo, creo que hay algunas cosas que no nos quedan muy claras con respecto a tu trabajo periodístico y a tu ética profesional.
Dada tu personalidad desafiante y audaz, entregada a “las causas nobles y a denunciar las injusticias”, muchos no se explican cómo es que un caso tan alarmante como el de la venta de órganos de bebés abortados que realiza Planned Parenthood no haya tenido ni una sola mención en los medios de comunicación a través de los cuales tu voz llega tan lejos.
Todos sospechan que la carrera política de tu hija Paola, quien trabaja para la campaña presidencial de la demócrata pro-aborto y gran amiga de Planned Parenthood, Hillary Clinton, correría un gran peligro si hablaras de este caso tan polémico con tu conocido tono inquisitivo y provocador.
¿Pero tú? ¿Jorge Ramos? ¿Ignorando una causa tan importante y urgente por motivos personales? Lo creería de cualquier otro periodista pero no de ti Jorge. ¡Jamás de ti!
La población hispana de Estados Unidos te ve como un héroe nacional, defendiéndolos a capa y espada contra todo y contra todos. Pero ¿qué hay de tu hermanos latinos más pequeños e indefensos? Esos que son las víctimas principales de Planned Parenthood, al igual que otras minorías.
Estoy segura de que un periodista tan informado como tú, sabe que estos centros de aborto están estratégicamente ubicados en barrios de inmigrantes y afroamericanos. Y seguramente también conoces la filisofía racista y eugenésica de su fundadora Margaret Sanger.
Conociendo tan bien estos hechos ¿dónde está el Jorge Ramos implacable y valiente que habla hasta en contra de la Iglesia Católica? ¡El que le reclama al presidente de México sus actos reprobables y corruptos! ¡El que hasta se opone a la canonización del Papa Juan Pablo II por culparlo de los abusos sexuales ocurridos durante su pontificado! ¿Dónde está?
¿Dónde está Jorge cuando un escándalo de esta magnitud necesita ser aclarado por Planned Parenthood? ¿Dónde está Jorge cuando los demócratas necesitan ser cuestionados por seguir apoyando a esta organización criminal? ¿Dónde está el héroe Jorge Ramos? ¿¡Dónde?!
En fin, seguramente has recibido más de algún cuestionamiento al respecto de este asunto y no pretendo que te tomes la molestia de responder al mío. Solo quería que supieras que hay muchas personas que no comprenden tu proceder, y que no pueden verte como el héroe que pretendes ser, mientras por intereses personales, guardes silencio ante un caso tan terrible que afecta directamente a los que dices defender.
Tus hermanos hispanos necesitan un héroe íntegro y transparente, no fragmentado y que con su silencio favorece a organizaciones y políticos según sus intereses personales. Lamento decirte querido Jorge que con tus acciones te has convertido en aquello que tanto criticas: en un “corrupto y encubridor”.
Ojalá que pronto te decidas a ser un héroe de verdad. Todavía estás a tiempo. La lucha contra la injusticia más grande de la historia no se ha terminado ¡apenas comienza!