Si va a abortar a su bebé, ámala primero.

Cómo hablar con una mujer decidida a entrar a un centro de abortos

Si quieres salvar la vida de su hijo, tienes que amarla a ella primero.

Con frecuencia, personas que tienen la oportunidad de hablar con una madre desesperada, nos hacen esta pregunta. ¿Qué decirle a una mujer que está decidida a abortar?

Te comparto lo siguiente aún sabiendo que a muchos les causará un gran shock.

Nota importante: Ten en cuenta que el tiempo es crucial. No desperdicies los pocos segundos o minutos que tienes con ella, para convencerla de que su postura sobre el aborto está mal. No estás ahí para hacerla pro-vida. Estás ahí para ayudarla y salvar a su hijo.

Cuando damos consejería a una chica, lo primero que hacemos es enfocarnos en ella, en su salud, en su bienestar.

Es un error hablarle de su bebé. Cuando una mujer decide ir a abortar a su hijo a una clínica, lo primero que hizo fue abortarlo en su corazón. Ella NO quiere escuchar sobre el bebé.

La manera de hacer que te escuche, es hablarle de ELLA. Que estás ahí para ELLA. Que quieres ayudarle a ELLA.

(No le menciones la adopción, o la ayuda que existe para su hijo todavía. Eso viene después. Poco a poco ella estará lista para abrir su corazón al bebé nuevamente).

Tampoco le hables de Dios, de condenación, de pecado, de la Biblia. En su mente, los pro-vida son fanáticos religiosos, que no tienen argumentos y solo están ahí para juzgarla. Ella no está lista para hablar de Dios todavía. Eso también vendrá después. Recuerda, enfócate en ELLA PRIMERO.

Lo que debe saber primero es que el aborto es un procedimiento antinatural que daña mucho a la mujer, física, emocional y psicológicamente.

Las personas que se practican un aborto sufren depresión, ansiedad, insomnio, pesadillas, pensamientos suicidas, abuso de drogas o alcohol, se vuelven dependientes de relaciones tóxicas o violentas (Síndrome Post-Traumático o Síndrome Post-Aborto).

El aborto además es un procedimiento peligroso y hace tanto daño a la mujer, que muchas de ellas sufren perforaciones del útero, de los intestinos, del estómago, hemorragias, infecciones, y hasta la muerte. En muchos casos, las mujeres quedan estériles.

El aborto causa además la interrupción violenta de una producción de hormonas natural en el embarazo, lo cual aumenta dramáticamente el riesgo de desarrollar cáncer de seno a largo plazo.

Debemos decirle a la chica: No tienes que hacerte esto. Hay opciones. Existe ayuda. Ninguna mujer merece pasar por el dolor y las secuelas de un aborto.

Ella estará mucho más receptiva a considerar la ayuda, una vez que le demuestres que ella te importa, y que estás ahí para darle una mano.

Si te dedicas a defender al bebé con consignas y a condenar a la mujer que está considerando un aborto, tu labor pro-vida no es muy efectiva que digamos.

Por lo tanto evita enseñarle imágenes gráficas de bebés abortados, letreros o imágenes condenatorias, gritar versículos de la Biblia… porque lo único que logras con eso es ahuyentarlas de las personas que realmente pueden ayudarlas.

Recuerda, debes olvidarte momentáneamente del bebé y concentrar todo tus esfuerzos en ella. Escúchala, dale palabras de aliento, dile que no está sola, pregúntale cuál es su situación, qué tipo de ayuda necesita, invítala a tranquilizarse, a tomar un café… lo demás vendrá después, mucho después. Primero ÁMALA A ELLA. Después ella amará a su bebé.

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